¿Qué aislante térmico elegir para tu reforma?

No hay día que no me pregunten que aislante térmico es el mejor para realizar una reforma. Siempre respondo lo mismo: » Es importante decir que un material aislante por si mismo no aísla, hace falta colocarlo de una manera específica con respecto a la fachada. Y como se coloca depende de varios factores, pero el principal factor es la composición previa de tu fachada». Y es que no hay una respuesta única, todo depende de lo que nos encontremos de base en la fachada. A continuación pretendo crear la guía definitiva de todas las maneras de aislar una vivienda en una reforma. Compararé todas las opciones en función de su idoneidad, ubicación y precio. Pero antes de comenzar esta comparativa explicaré cada uno de los tipos de materiales aislante que se usan en la actualidad como aislamiento térmico, para luego detallar los 3 principales sistemas: el SATE, los insuflados y los trasdosados.

Tipos de Aislantes Térmicos

Lana de Roca

La Lana de Roca, un material aislante termo-acústico, que se fabrica a partir de fibras minerales naturales, como basalto o escoria de alto horno. Es de los materiales más usados en construcción y reformas, por su ligereza y facilidad de montaje. Se presenta en formas como paneles, mantas y rollos. Su principal ventaja es que es que tiene una gran conductividad térmica (λ =0,036 W/m·K), por lo que estamos hablando de un gran aislante térmico , además destaca su resistencia al fuego, durabilidad y capacidad para resistir altas temperaturas.

En términos ambientales, este material destaca por su reciclabilidad y la posibilidad de reutilización en nuevos productos. Además, algunas variantes son fabricadas con bajas emisiones de compuestos orgánicos volátiles (COV), contribuyendo así a prácticas más sostenibles en la construcción y reforma. En resumen, la Lana de Roca se presenta como una opción versátil, eficiente y respetuosa con el medio ambiente para mejorar el confort en los espacios habitables.

Lana de Vidrio

La Lana de Vidrio, muy similar a la lana de roca, es un aislante térmico y acústico, se compone de fibras de vidrio reciclado y arena, fusionadas a altas temperaturas. Este material se suele presentar, al igual que la lana de roca, en formato de mantas y paneles, siendo aplicado comúnmente en paredes, techos y suelos para mejorar la eficiencia energética y proporcionar aislamiento acústico. Su conductividad térmica (λ =0,032 W/m·K) es también muy alta, por lo que resulta muy similar a la anteriormente citada lana de roca. Entre sus ventajas se incluyen un alto rendimiento térmico, resistencia a la humedad y durabilidad, siendo no combustible para proporcionar un nivel adicional de seguridad.

La Lana de Vidrio emerge como otra opción eficiente y respetuosa con el medio ambiente, ofreciendo soluciones efectivas para mejorar las condiciones térmicas y acústicas en diversos entornos construidos.

Poliestireno Expandido EPS

El Poliestireno Expandido (EPS) es un material aislante de uso común conocido por su ligereza y versatilidad. Producido a partir de perlas de poliestireno expandido mediante un proceso de expansión, este material presenta una estructura celular cerrada que le confiere propiedades únicas. 

Las ventajas del EPS incluyen su ligereza, lo que facilita la manipulación e instalación, y su capacidad para resistir la humedad. Asimismo, ofrece un aislamiento térmico eficiente con una conductividad térmica (λ =0,036 W/m·K) y contribuye a la reducción de ruido en espacios interiores. 

Al considerar el EPS, es esencial evaluar su aplicación específica y las necesidades del proyecto. Su instalación sencilla y su capacidad para adaptarse a diferentes formas y tamaños lo convierten en una opción atractiva. Además, desde un punto de vista ambiental, el EPS es reciclable y su producción puede requerir menos energía en comparación con otros materiales aislantes, contribuyendo así a prácticas más sostenibles en la construcción y reforma. 

Poliestireno Extruido XPS

El Poliestireno Extruido (XPS) es un material aislante derivado del poliestireno mediante un proceso de extrusión, donde el polímero se funde y se expande para formar una estructura celular cerrada. Este método de fabricación le confiere propiedades térmicas excepcionales, convirtiéndolo en una opción popular para aplicaciones de aislamiento.

El XPS se presenta en paneles rígidos y es utilizado extensivamente en la construcción para aislar paredes, techos y suelos. Su estructura celular cerrada le otorga una alta resistencia al agua, lo que lo hace ideal para aplicaciones donde la resistencia a la humedad es crucial y en climas húmedos. Además, se utiliza en sistemas de aislamiento perimetral y para mejorar la eficiencia energética de edificaciones.

El XPS destaca por su excepcional capacidad de aislamiento térmico con una conductividad térmica (λ =0,029 W/m·K) , su resistencia a la humedad y su versatilidad en aplicaciones de construcción. Su estructura rígida y duradera lo hace apto para proyectos donde se requiere resistencia mecánica. Sin embargo, es esencial considerar su impacto ambiental, ya que el proceso de fabricación del XPS implica el uso de gases inflamables y contribuye a la generación de residuos plásticos. Se recomienda evaluar alternativas más sostenibles según las necesidades del proyecto.

Espuma de Poliuretano

La espuma de poliuretano es un material versátil y expansivo creado mediante la reacción química de dos componentes, un poliol y un isocianato. Este proceso genera una espuma que se expande rápidamente, adaptándose a la forma y tamaño del área aislada. La espuma resultante es conocida por sus propiedades aislantes y su aplicación en una variedad de contextos.

La aplicación de la espuma de poliuretano es flexible y se adapta a diversas necesidades. Se utiliza comúnmente para sellar grietas, rellenar espacios y aislar áreas específicas en construcción. También se aplica en la fabricación de productos aislantes, como paneles y placas.

La espuma de poliuretano destaca por ser una de las opciones más baratas y no por ello compromete su eficiencia en el aislamiento térmico con una conductividad térmica (λ =0,036 W/m·K) . Su sellado hermético ayuda a prevenir filtraciones de aire y agua. Sin embargo, es esencial aplicar con precaución, ya que la expansión puede causar daños si no se maneja adecuadamente. Además, algunas formulaciones pueden contener productos químicos volátiles, por lo que se deben considerar alternativas más ecológicas en proyectos sensibles al medio ambiente.

Otros

Existen innumerables materiales que se usan como aislantes en reformas. He desarrollado los principales aislantes aunque quiero hacer mención a algunos otros, que aunque se usan de manera menos frecuente, son también excelentes opciones como alternativa sostenible a los más usados:

• Celulosa
• Fibras de madera
• Fibras orgánicas
• Grafito
• Posidonia (alga marina)

Aspectos a tener en cuenta antes de elegir un aislante térmico

1. En zonas de costa mediterránea, o climas húmedos, es recomendable el uso de materiales que no absorban la humedad y que sean impermeables. Los dos mejores aislantes para estos casos son el Poliestireno extruido XPS o la Espuma de poliuretano.
2. En zonas de interior, donde hay mucho calor en verano o mucho frío en invierno, se recomiendan materiales con mayor resistencia térmica y con más espesor (por lo general entre 2-3cm más que en zonas de costa). Por lo general los más usados son la Lana de Roca y la espuma de poliuretano.

Cómo y Dónde se coloca el aislante térmico en una reforma. Elección del sistema: ¿SATE, Insuflado y Trasdosado?

Probablemente esta es la decisión más importante a la hora de elegir el aislante para la reforma de una vivienda. En internet y redes sociales suele haber mucha desinformación acerca del tema, y te suelen vender un sistema que es ideal para todos los contextos. Sin embargo, esta generalización es engañosa. No hay una solución única que se ajuste a todos los casos. Cada reforma demanda un estudio individualizado para determinar la opción más adecuada, desmitificando la idea de soluciones universales.

Aunque hay muchas variantes, todas se pueden agrupar en 3 grandes grupos: aislamiento por el exterior, en el interior de la cámara de aire y por el interior.

Aislamiento por el exterior (SATE: sistema aislamiento térmico por el exterior)

El SATE consiste en aplicar un material aislante, generalmente EPS o XPS, al exterior de la fachada. Esta aplicación por el exterior elimina todos los puentes térmicos que pueda tener la vivienda además de una mejora significativa del confort térmico en el interior de la vivienda. Al aislar térmicamente la fachada desde el exterior mediante el sistema SATE, se logra una eficiencia económica y energética notable. Este enfoque reduce de manera significativa las pérdidas de energía que comúnmente ocurren a través de la fachada del edificio. 

Su uso queda relegado principalmente para viviendas unifamiliares (Chalet, adosados,..).Ya que en un edificio, a no ser que se cambie por completo en toda la fachada, alteraría la fachada del mismo.

Aislante por el interior de la cámara de aire (Insuflados)

Esta es una de las opciones más usadas y más económicas para aislar una vivienda en una reforma. La única condición que tiene que cumplir la vivienda es que tenga una cámara de aire en su fachada. Esta cámara de aire se llenaría de material aislante, principalmente espuma de poliuretano, aunque también se insufla Lana de roca, Celulosa Blanca, Fibra de Madera y perlas de Grafito. Mejorando de manera significativa el aislamiento de la vivienda. La principal ventaja, además de ser una opción rapidísima, es que no necesita prácticamente obra, ya que se realizan todo a través de unos pequeños agujeros.

El principal inconveniente de este sistema, es que no va a ser capaz de reparar los posibles puentes térmicos que pueda tener una vivienda. Perdiendo un poco de eficiencia térmica. Aunque la mejora de eficiencia va a ser muy significativa.

Aislante por el interior en una reforma (Trasdosado interior)

Esta opción consiste en aplicar un material aislante por el interior. Principalmente se suele usar trasdosados de Pladur por su rapidez, facilidad de montaje, por el ahorro de espesor y la diferencia de peso con respecto a un tabique tradicional. Al igual que con el SATE, elimina los puentes térmicos de la fachada, y mejora significativamente el confort térmico interior de la casa después de la remodelación.

El principal inconveniente de este sistema es que se pierde espacio interior (muy poco) y en espacios muy reducidos (dormitorios) se puede ver comprometido el uso del mismo.

Cuanto cuesta el aislante en una reforma

Como ya hemos visto, existen múltiples combinaciones de materiales aislantes y sistemas de montaje; además cada uno de estos con diferentes opciones de espesor y además que se pueden de distintas maneras. Lejos de intentar confundir, voy a simplificar las múltiples opciones y voy a seleccionar las combinaciones más usadas en reformas.

Precio de SATE para reforma por aislante por M2  

• SATE con EPS el precio oscila entre unos 40-60 €/m2
• SATE con Lana de roca mineral el precio oscila entorno unos 120 €/m2

Precio de Insuflado por aislante para reforma

• Insuflado de Lana de Roca 20-25 €/m2
• Insuflado de Poliuretano proyectado 12-16€/m2 
• Insuflado de Celulosa Blanca 10-15 €/m2

Precio de Trasdosado en reforma

• Trasdosado con tabique de PYL con Lana de Roca 15-22 €/m2
• Trasdosado con tabique de PYL con lana de Roca Doble 40 €/m2

Caso Práctico

Ahora voy a analizar y comparar los 3 sistemas para ver cuál será más eficaz en una reforma de una casa antigua tradicional que tiene un cerramiento con cámara de aire (capuchina) en dos zonas de Andalucía. Una será en la zona climática de la costa del sol (Málaga) y otra en el interior (Granada). Elijo este tipo de fachada porque es una de las más comunes y las dos zonas climáticas representan un sitio con mucha humedad, y otro un clima de interior.

Punto de partida de la vivienda (Fachada base)

Antes de analizar los 3 sistemas, vamos a evaluar el punto de partida. Vamos a reformar la envolvente de un piso que carece de aislante térmico pero que si tiene cámara de aire interior. Se trata de una de las fachadas más tradicionales y usuales en España. Se trata de un ejemplo de fachada real que analicé para este proyecto.

Todos los ejemplos que vamos a ver a continuación se han calculado considerando que la fachada se sitúa en Málaga (zona C3 según el CTE) y en Granada (zona C3 según el CTE). 

Como vemos en la imagen la transmitancia total de esta fachada antes de la reforma es de U = 1,27 w/m2·K. Esta cifra Mide la cantidad de calor que atraviesa este elemento en una unidad de tiempo y superficie, es decir, cuánto calor se pierde o gana a través de la fachada.

Ahora compararé las transmitancias haciendo una serie de modificaciones a esta fachada para mejorar su aislamiento y poder cumplir el Código técnico de edificación (CTE).  Además al cumplir el CTE voy a tener un mejor confort térmico en esta vivienda y una mayor eficiencia energética. El primer sistema que analizaré será el SATE tanto con EPS como con LANA de ROCA, después los insuflados con Lana de roca, poliuretano y celulosa blanca y por último un trasdosado de pladur con 7 cm de espesor de aislante y otro con 11cm. 

Antes de analizar las diversas alternativas para mejorar el aislamiento de nuestra fachada verifico los valores máximos establecidos por el CTE en las zonas climáticas de Málaga (Costa) y Granada (Interior), que deben cumplirse de manera obligatoria en cualquier construcción o reforma llevada a cabo en España.

Según el CTE las transmitancias límite y recomendadas para Granada (Zona Climática C3) son

• Transmitancia térmica límite marcada por el CTE en Granada – 0,49 W/m2·K
• Transmitancia térmica recomendada por el CTE en Granada – 0,29 W/m2·K

Según el CTE las transmitancias límite y recomendadas para Málaga y la costa del Sol (Zona Climática A1) son:

• Transmitancia térmica límite marcada por el CTE en la Costa del Sol – 0,7 W/m2·K
• Transmitancia térmica recomendada por el CTE en la Costa del Sol – 0,5 W/m2·K

Aunque la transmitancia límite es el límite marcado por la normativa, a mi me gusta recalcar que cuanto más cerca estemos de la recomendada más eficiente será nuestra casa y menos energía invertiremos luego en climatizarla.

Fachada con SATE de EPS

Fachada con SATE de Lana de Roca

Fachada con insuflado de Lana de Roca

Fachada con insuflado de Poliuretano

Fachada con insuflado de Celulosa Blanca

Fachada con trasdosado de Pladur y Lana de Roca 7 cm de espesor

Fachada con trasdosado de Pladur y Lana de Roca de 11 cm de espesor

Comparativa de sistemas, materiales aislantes y resistencias térmicas

Como se puede observar, el Sistema de SATE es el mejor sistema para implementar en una reforma, ya que ni tiene puentes térmicos ni pierdes espacio. El gran problema como ya hemos comentado, es que este sistema queda relegado principalmente a reformas en casas unifamiliares. Además, es el sistema más caro de los 3, el que más se tarda en ejecutar y el que implica tener que contratar a una mano de obra más cualificada.

Por el contrario, el Insuflado, es la opción ideal para todas las personas que quieran mejorar el confort térmico interior de su vivienda. Es la opción más económica, más rápida y más limpia. La única pega es que necesitas tener una cámara de aire en tu fachada para poder rellenarla de cierto espesor y que no vas a solucionar los posibles puentes térmicos que tenga tu piso. Además, como podemos ver, va a ser muy difícil poder cumplir con los requisitos mínimos que establece el CTE en climas interiores.

El trasdosado, es una opción genial, que a priori, solo utilizaría en casos concretos. Aunque claramente tiene muchas ventajas, el hecho de que se pierda algo de espacio es un gran inconveniente. Estos serían los casos en los que yo recomendaría realizar un trasdosado: 

1. Que no exista cámara de aire en la fachada. 
2. Que existiendo cámara de aire en la fachada está sea menor de 3cm
3. Que vivas en un clima interior con inviernos y veranos muy exigentes (p.e. Granada)
4. Que tengas un piso muy grande y no te importe perder un poco de espacio para ganárselo a la eficacia de la fachada.

Análisis comparativo Aislante-Sistema en la Costa del Sol

En resumen y según lo detallado en la tabla comparativa, en la Costa de Málaga, es viable mejorar significativamente el aislamiento de nuestras fachadas con una inversión moderada, cumpliendo satisfactoriamente con los límites y recomendaciones actuales del CTE sin necesidad de grandes obras. 

Análisis comparativo Aislante-Sistema en Granada

Por otro lado, en zonas climáticas más exigentes como la de Granada, cumplir estrictamente con las normativas del CTE resulta más desafiante. Con el insuflado, se aproximaría al límite establecido en cuanto a las transmitancias térmicas del CTE, pero no alcanzaría las recomendaciones. Es esencial reconocer que el insuflado, al estar al límite de cumplimiento del CTE, tiene sus inconvenientes, ya que no elimina puentes térmicos preexistentes (como lo hace el trasdosado) y no garantiza un llenado total del material aislante en la cámara de aire. Por esta razón, cuando los valores de transmitancia térmica en el insuflado se aproximan o igualan los límites establecidos, se sugiere no considerarlos como satisfactorios.

En el caso de Granada para un piso, para asegurar el cumplimiento estricto del CTE, sería necesario optar por un trasdosado de Pladur con aislante incorporado de 6 cm de espesor. No obstante, este escenario no cumpliría con las recomendaciones del CTE en cuanto a eficiencia energética, que son más exigentes para climas de esta índole. Para alcanzar dichas recomendaciones, sería necesario elegir un trasdosado de 10 cm de Pladur con aislante incorporado.

Considero valioso reflexionar sobre si la inversión adicional en esos 10 cm de espesor en el pladur será rentable a corto y medio plazo en nuestras facturas energéticas. Personalmente, estoy convencido de que sí, incluso cuando con un trasdosado de 6 cm cumpliríamos con las normativas.

Resolución de dudas

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